La territorialidad de los directivos....y de los no directivos.
Estas últimas semanas he continuado trabajando para una compañía con la que estoy colaborando de forma intensa estos dos últimos años. Creen con certeza que en un momento cómo el actual es cuando más deben apoyar y ofrecer recursos a sus equipos.
Cuando analizamos con distintos grupos de participantes como potenciar la transferencia de sus planes de acción tras programas de desarrollo de competencias que han realizado, aparece de forma continua la problemática del control del territorio de cada directivo, mando o profesional. Es decir, la dificultad de innovar o mejorar por qué directivos o mandos no quieren perder el mínimo control de su área de actuación o no permiten potenciar el trabajo en equipo por qué eso implica dar para recibir y permitir abrir las puertas a las áreas de cada uno. Esta defensa y control de la territorialidad no es específica de esta compañía, al contrario, estamos consiguiendo reducirla tras cinco años de trabajo de aplicación de un modelo de Gestión por Competencias. Es algo común en cualquiera de las organizaciones con las que he trabajado como consultor. Si bien la cultura de cada empresa potencia o disminuye la necesidad de la territorialidad y el control, me atrevo a decir que es característica transversal de nuestro entorno empresarial.
La defensa del territorio y la lucha por defenderlo es parte de la historia de la humanidad, pero lo que más me divierte es que es un comportamiento con fuerte base etológica. Frans de Waal lo pone de manifiesto en sus ensayos sobre el comportamiento de bonobos y chimpances, las luchas por defender el territorio y el poder son constantes. Por tanto, estamos todavía lejos del liderazgo tan seductor que nos han trazado autores como Boyatzis o Goleman, en que el líder se mueve por la influencia y la confianza y poco por el control y el poder o de muchos más modelos tan de moda y que continúan dando vueltas sobre un líder carismático que destaca todavía por su escasa presencia. Estamos lejos aun aunque también creo que hay avance.
Dolan y Raich, profesores de ESADE, plantean en "Más allá" que una de los nuevos escenarios para salir de esta crisis global que estamos viviendo y generar cierta transformación es compartir un modelo centrado en la cooperación y el respeto. Yo también lo creo así y hay que continuar haciendo esfuerzos en las compañías para ir generando cierta necesidad de cambio y nuevo modelo. Talento, Desarrollo, Gestión de Personas, Crecimiento profesional...son palabras que llegan al absurdo sin este cambio en profundidad.
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